Cortar en cubos o dados el queso panela, más o menos del mismo tamaño de los tomates, si se te dificulta hacerlo con un cuchillo también puedes hacer esto con ayuda de un cortador para galletas también puedes cortar el queso y de esta forma asegurarte que queden todos del mismo tamaño.
Cortar los tomates por la mitad, a mí me gusta hacerlo así pero también al ser tomates pequeñitos puedes dejarlos enteros.
Tomar un palito de brocheta e insertar intercalados tomates y queso panela con cuidado de no romper ninguno de los dos hasta terminar con un trozo de tomate. Reservar las brochetas mientras preparamos la vinagreta con la que aliñaremos las brochetas.
En un procesador o en una licuadora colocar las hojas de albahaca, incorporar el aceite vegetal y el jugo de limón.
Agregar la sal y procesar hasta que se integre y tengamos una mezcla homogénea. Comprobar el sabor, si es necesario agregar más sal.
Servir las brochetas bañando con la vinagreta de albahaca.
Recomendaciones de la cocina para elaborar brochetas de panela y tomate:
Puedes agregar más vegetales a la preparación, por ejemplo puedes agregar pimientos frescos, champiñones o lo que más te guste para una ricas y frescas brochetas.
Si te cuesta conseguir el queso panela lo puedes sustituir por cualquier otro queso fresco que sea firme como un queso mozzarella que combina a la perfección con estos sabores