Comenzar con picar muy finamente todos los vegetales, el ajo, la cebolla y los dos pimientos. Si no quieres picarlos muy finos también puedes agregar trozos más grandes y después licuar la salsa.

Colocar en un cacerola o sartén un poco de aceite de oliva y saltear el ajo y la cebolla en este hasta que se acitrone la cebolla.

Agregar los pimientos tanto el pimiento rojo como el amarillo y sofreír con los ingredientes por unos cuantos minutos más.

Enseguida agregar los tomates en lata, yo he conseguido los tomates en lata que vienen ya en dado pero si no los tienes o no los quieres comprar también puedes utilizar tomate fresco sin piel y sin semillas.

Calentar hasta llevar a ebullición y agregar los condimentos: el tomillo, el orégano, la paprika y las hojas de laurel.

Condimentar con sal y pimienta al gusto. Una vez que la salsa tenga el sabor que queramos y se haya espesado ligeramente, retirar del fuego y dejar que se enfríe ligeramente.

Cortar las verduras en rodajas lo ideal es con una mandolina para que las rodajas sean del mismo tamaño pero si no la tienes también puedes utilizar un cuchillo. Otro punto importante es cuidar que las verduras tengan un tamaño similar.

Una vez que las rodajas están listas, colocar en un molde que podamos llevar al horno la salsa de tomate que preparamos y distribuir uniformemente.

Encima de la salsa agregar las rodajas de vegetales (berenjena, calabacín,tomate) coloca una a una las rodajas de manera intercalada para que sea más vistoso.

Espolvorea el queso parmesano el tomillo en polvo y sal y pimienta para condimentar.

Lleva al horno por 20 minutos aproximadamente a 180°C hasta que las verduras estén cocidas.

Si no quieres darle esta presentación y buscas algo más sencillo trocea los vegetales en cubos para que sea más fácil y mezcla con la salsa.

Utiliza una variedad de vegetales para darle sabor a la receta, puedes utilizar cebolla morada, más pimientos etc.

Condimenta con diferentes especias como el romero o la albahaca.